Seguro que más de una vez habéis oído que San Valentín es un invento del Corte Inglés para que consumamos más, pero la verdad es que esta tradición se remonta a la época de los romanos.
Hay varias teorías sobre el origen de esta tradición, pero la más aceptada es esta:
Cuenta la leyenda que el emperador romano prohibió casarse a los jóvenes soldados porque así rendían mejor en la batalla, los casados querían volver junto a sus esposas demasiado rápido. Y un sacerdote llamado Valentín se apiadó de ellos y casaba en secreto a parejas jóvenes de enamorados. Cuando el emperador lo descubrió, lo mandó apresar, lo martirizó y condenó a muerte el 14 de Febrero.
Mientras esperaba su condena, obró un milagro y devolvió la vista a la hija de su carcelero, de la que se enamoró posteriormente. Antes de su muerte, le escribió una carta declarándole su amor y la firmó como Tu Valentín. Y esa fue la primera tarjeta de San Valentín de la historia.
Ya en la Edad Media, tomando como ejemplo la historia de este mártir, se empezó a celebrar en Europa el 14 de febrero el día dedicado al amor. Ese día tan señalado las personas empezaron a intercambiarse tarjetas con mensajes románticos con la esperanza de conquistar a sus enamorados. También les mandaban cajitas con chocolates porque se creía que era un estimulante de las pasiones.
Hoy en día sigue la tradición de regalar tarjetas y chocolates, pero se ha extendido a todo tipo de regalos, razón por la cual muchos ven esta fiesta como un acto consumista, en vez de romántico.
En el siguiente post, 3 ideas fáciles y rápidas para regalar en San Valentín os contaremos como sorprender a tu pareja con detalles low cost, porque lo importante es el amor, no lo que te gastes en el regalo.